LA REINA DE RAGULIA: PRIMERA PARTE

No era un peluche como los otros. Desde que tenia meses le habia acompañado, de la mecedora a la cuna y de la cuna a la cama. 14 años después ese conejo blanco sigue siendo el compañero preferido para Marta. Juntos habian dejado atras la infancia, la niñez, los primeros pasos las primeras palabras... ahora Marta entraba en la fase crucial de su vida, la adolescencia, el instituto, la parte final y decisiva de la formacion de una persona, y quería junto a ella a su conejito blanco. Se sabia de memoria todas las pelos, fibras e hilos que componian ese peluche, pero un dia justo antes de dormir descubrió una especie de cremallera. Pequeña para ser llmada así, era como una hendidura oculta tras una de sus largas orejas rosas....

Alguien se habia encargado de taparla ademas con un lazito azul. Pero Marta la vió y decidió sin pensar abrirla. Dentro de la hendidura solo habia un pequeño papelito, amarillento, viejo, pero cuidadosamente doblado, donde podia leerse con letras de tinta: CALLE DEL VIENTO PURPURA, 18. Una dirección, solo eso. Marta iria mañana mismo a ver que habia en ese lugar.
Esa calle formaba parte de una urbanización nueva en la que habian construido casas unifamiliares y pequeños locales. Era una de las partes más tranquilas y cultas de la ciudad. Estaba situada a las afueras pero no era en absoluto una zona de peligro. Faltando a clase y sin decir nada a nadie, Marta acudió al lugar. Era una libreria nueva, con miles de estanterias, y posters de peliculas de aventuras. Decidio entrar sin preguntar a la bibliotecaria situada detras del mostrador. Algo le habia llevado alli y tenia que averiguar el siguiente paso.

Seguramente seria un libro, pero cual, entre miles y miles de libros, cuadernos etc. Que era lo extraño, lo fuera de lo común, lo que podria contener la siguiente pista para avanzar. No fue fácil pero Marta descubrió que las estanterias estaban ordenadas por un curioso criterio. Nada de categorias ni de tematica, no. Lo que lo oredenaban eran los colores y el grosor. Es decir, estaba la estanteria de los libros muy gordos negros, los libros muy finos negros, los libros azules gordos, los finos azules y asi sucesivamente. Eso lo ponia más facil para descubrir la diferencia... y encontró uno verde gordo, desordenado, metido con los rojos finos. Ese era el que buscaba. Lo abrió... estaba en blanco, nada ni una ilustración, ni un texto nada...pero en una de sus paginas, la unica con la punta doblada habia un pequeño agujero de apenas unos centimetros. Marta vió que era el hueco donde habian escondido el papel con el siguiente lugar a visitar...AVENIDA DE LOS REALES IMPERIOS 4. Ostras, esa dirección si que daba miedo... los reales imperios era una avenida que habian demolido hacia años para construir una variante con sus correspondientes rotondas... era extraño que marcase una vivienda de alli, de todas formas, Marta iría a investigar......

Como si dentro de un libro estuviera, Marta estaba viviendo involuntariamente una historia apasionada y muy prometedora que seguire explicando en futuros blogs.. ahora para cerrar un clasicazo de los 80 que habla de meterse en comics..


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